Sagres es el último pueblo de Europa continental. Una pequeña ciudad de ambiente algo hippie, surfero y amante de la vida al natural. Maravillosas playas, paraíso de surfistas y amantes de la Naturaleza, escondidas entre impresionantes acantilados: Ingrina, Zavial, Burgau, Beliche, Arrifana... Y el Cabo de San Vicente, cuyo faro sigue despidiendo hoy en día a todos los buques que dejan Europa para cruzar el Atlántico.